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Benvinguts al blog de les biografies musicals relacionades amb JUDAS PRIEST.

La seva creació respon a la necessitat d' anar afegint noves dades que no es troben recollides en les actuals edicions en paper -tant a Judas Priest. Los dioses del metal (Quarentena Ediciones, 2008) com a Judas Priest. Los defensores de la fe (Quarentena Ediciones, 2012)-, així com informacions derivades de la seva publicació. Igualment vol servir de nexe entre l'autor i aquells lectors que vulguin expressar-li la seva opinió.

Su creación responde a la necesidad de ir añadiendo nuevos datos que no se encuentran recogidos en las actuales ediciones en papel
-tanto en Judas Priest. Los dioses del metal (Quarentena Ediciones, 2008) como en Judas Priest. Los defensores de la fe(Quarentena Ediciones, 2012)-, así como informaciones derivadas de su publicación. De la misma manera quiere servir de nexo de unión entre el autor y aquellos lectores que quieran expresarle su opinión.



29 d’agost 2014

Y hablando de cumpleaños...


Aprovechando que Rob celebró sus 63 años el pasado lunes, no hacemos eco del fragmento de una antigua entrevista de finales de los años noventa publicada por la revista The Advocate y que la web TheMetalCircus ha recuperado. En ella Halford hablaba abiertamente de sus tortuosas relaciones sentimentales y de sus adicciones. 

Además de muchas preguntas por su vida como homosexual en los años 70 y 80 en el marco de una gran banda de heavy metal, Halford se sinceró frente a hechos menos conocidos de su vida personal. Halford admitía que es un celoso (“soy el típico tío celoso disfuncional, porque para mi está bien tontear por ahí, pero no quiero tu lo hagas”) y admitía sus desencantos con los hombres (“una gran parte de mis relaciones fueron esencialmente con hombres heterosexuales que de golpe se iban y se casaban. Simplemente experimentaban conmigo”).

Halford también hablaba de sus propios sentimientos de aislamiento en un mundo predominantemente heterosexual, el del rock and roll. “Era horrible” explicaba. “El show termina y todo el mundo se va al bar de strippers y se llevan a un montón de chicas a sus habitaciones. Yo no era así. Soy un hombre gay. Así que estaba muy aislado y solo. Haces un show delante de miles de fans que te adoran y luego…”. Halford bromeaba: “Imagínate, todos esos hombres delante de ti y te vas a tu habitación totalmente solo. Son las 11:30, cierro la puerta en el hotel y veo el The Tonight Show y me quedo dormido mientras todo el mundo está corriendo por los pasillos y haciendo cosas orgiásticas propias del rock and roll”.

Pero uno de los momentos clave de la entrevista llega cuando Halford es preguntado por su adicción al alcohol, que terminó con el vocalista metido en rehabilitación el 6 de enero de 1986, semanas después de haber acabado la grabación de “Turbo”, uno de los discos más controvertidos de Judas Priest.

Preguntado sobre los motivos que le llevaron a meterse en un centro de rehabilitación, Halford se sincera. “Fue un cataclismo” explica. “La mayoría de hombres que me atraen, incluso ahora, son heterosexuales. El chico con el que estaba saliendo en aquel entonces tenía un problema con la cocaína. Teníamos una atracción física brutal, y había una enorme cantidad de violencia. Nos golpeábamos todo el tiempo en nuestros momentos de locura alcohólica y cocainómana. Y un día, estábamos peleando y me largué por mi propia seguridad, llamando a un taxi. Mientras me estaba metiendo en el taxi, el vino y me dijo ‘escucha, quiero que sepas que te quiero mucho’. Cuando se dio la vuelta, vi que tenía una pistola. Momentos después se llevó la pistola a la cabeza y se suicidó”.


Sin abandonar este mismo portal, recuperamos una interesante, jugosa y extensa entrevista, dividida en dos partes, que su director, Sergi Ramos, realizó al cantante de Judas Priest entre finales de 2007 o principios de 2008 para la revista Zero. Aquí van los enlaces: